Desde COVID-19, los códigos QR se han generalizado y aparecen en todas partes, desde los menús de los restaurantes hasta los métodos de pago. En el campo del Facility Management, los códigos QR se utilizan ahora para informar de problemas en las salas de reuniones, recabar opiniones sobre el servicio e incluso hacer un seguimiento del personal de campo, sobre todo en limpieza y mantenimiento.
Pero, ¿son los códigos QR realmente adecuados para un uso profesional? ¿Son suficientemente seguros? ¿Y cómo funcionan exactamente?
Un código QR actúa como un pequeño dispositivo de almacenamiento que contiene información limitada. En lugar de datos codificados en un disco duro, los datos de un código QR se organizan visualmente, con cuadrados negros que representan "1" y cuadrados blancos que representan "0". Este patrón binario crea una "memoria visible" fácilmente descodificable por cualquier dispositivo con cámara.
La cantidad de datos que puede almacenar un código QR depende de su tamaño, pero incluso los códigos QR grandes están limitados a unos pocos miles de caracteres. Por ejemplo, si un código QR contiene la frase "Estoy feliz", cualquiera que lo escanee podrá leerlo. Y una vez impreso, la información almacenada en un código QR permanece inalterable.
Probablemente te habrás dado cuenta de que al escanear algunos códigos QR se abre una página web. En estos casos, el código QR contiene una URL en lugar de texto sin formato. Tu smartphone descodifica el enlace y lo abre en un navegador para acceder a la página deseada. Sin embargo, si esta URL cambia, tendrías que volver a imprimir los códigos QR para actualizar el destino. Para evitarlo, muchas empresas utilizan códigos QR dinámicos que incluyen una URL intermedia, lo que permite actualizar la página de destino sin necesidad de volver a imprimir el propio código QR.
A primera vista, los códigos QR dinámicos parecen ideales para hacer un seguimiento del personal sobre el terreno o recoger opiniones. Los usuarios simplemente escanean el código, son redirigidos a un formulario de registro o a una página de comentarios, y la tarea está hecha. Sin embargo, hay que tener en cuenta un problema de seguridad crítico: el riesgo de fraude.
Dado que la URL de un código QR sigue siendo la misma, aunque sea dinámica, puede fotografiarse o compartirse fácilmente. Esto permite a los empleados fichar desde cualquier lugar simplemente accediendo al enlace, en lugar de estar presentes in situ. Esta brecha puede dar lugar a discrepancias salariales y a datos poco fiables, especialmente para las empresas que gestionan un gran número de centros.
Este problema no se limita al seguimiento del personal, sino que afecta a cualquier uso profesional de los códigos QR, desde las encuestas de satisfacción del cliente hasta los informes de incidencias. Sin seguridad adicional, los datos recopilados mediante códigos QR no son totalmente fiables.
Algunos sugieren utilizar la geolocalización para confirmar la presencia física de un usuario, pero este enfoque tiene importantes inconvenientes. Los usuarios pueden negarse a compartir su ubicación o incluso manipularla con aplicaciones sencillas. La geolocalización también tiene limitaciones espaciales: por ejemplo, no puede diferenciar entre una habitación en la primera planta de un edificio y otra en la vigésimo séptima. Un empleado podría completar rondas desde su mesa sin visitar físicamente cada zona. Confiar únicamente en la geolocalización para la seguridad puede acarrear complicaciones técnicas, prácticas e incluso legales.
¿Significa esto que los códigos QR no son adecuados para uso profesional? No necesariamente. Los códigos QR siguen siendo una tecnología sencilla y eficaz con una amplia gama de aplicaciones. Para superar los problemas de seguridad, Taqt ha desarrollado un código QR rotativo seguro patentado.
Esta innovadora solución muestra un código QR que cambia periódicamente, haciendo casi imposibles los intentos de engaño. Utilizado como un código QR tradicional, este sistema inutiliza los códigos copiados o las URL compartidas. Con el código QR rotativo de Taqt, el sector del Facility Management puede aprovechar todo el potencial de los códigos QR sin comprometer la seguridad.
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